miércoles, 12 de marzo de 2008

12-03-08: Mi primera vez.

Hay momentos en la vida de una persona que suponen un antes y un después, puntos de inflexión tras los cuales miras atrás a tu yo anterior y te das cuenta de que el yo de ahora es un poco más maduro, concretamente en el género masculino la frase que viene a la cabeza es "ya está hecho un hombre". Por diversas razones que no vienen necesariamente a cuento, he dejado que ese momento no se diese en mí durante muchos años.

Hasta anoche.

Así es, ayer hice mi primera tortilla de patatas.


Un poco hecha de más, pero bueno, no se me pegó, lo cual está bastante bien para la primera vez. Y para rematar la faena, estaba bastante buena, si se me permite la modestia. Si hubiese tenido mahonesa habría terminado de bordar la faena pero bueno, no se puede tener todo. Tres patatas, tres huevos y una cebolla bastan para sentirte como en casa otra vez, que no es poco (aunque si hubiese querido sentirme como en casa habría hecho la tortilla un lunes, pero eso es otra historia).

Nunca he sido un tipo muy "cocinitas" (ese puesto siempre estará reservado para Sebas, cocinero oficial del 3F-Clan). Cuando me desteté y me fui a Granada a estudiar descubrí lo maravilloso (y barato) que era comer 6 días a la semana mucho y variado (aunque no siempre de mi gusto) en los benditos Comedores Universitarios, lo cual te quita el quebradero de cabeza de pensar qué vas a almorzar, centrándote como mucho en la cena: normalmente arroz, pasta, un bocadillo de algo, una pizza casera o algo de carne con ensalada (normalmente de bolsa). Sí, mi dieta ha tenido siempre una variedad mas bien escasa, fruto sin duda de mis nulas ganas de cocinar y del consuelo de que la variedad que no me cocino yo me la daban hecha en los Comedores.

Pero entonces te vas a Noruega, y allí no existen los Comedores Universitarios. Bueno, existen las cafeterías de las facultades, donde los estudiantes noruegos acostumbran a comer muy a menudo y que se puede describir como el paraíso del vegetariano y el amante de la comida fría. El vegetariano y el amante de la comida fría con dinero, por supuesto. Añadir que la manzana más ácida que he probado en toda mi vida (tanto que parecía amarga) salió de una de esas cafeterías.

Cuando te das cuenta de que no sólo vas a tener que cocinar un plato más al día, sino que además no dispones de los ingredientes que podrías adquirir normalmente en España (la carne es un lujo aquí) ni tampoco de los medios a los que estabas acostumbrado (este "piso" no tiene horno ni microondas) es el momento de buscar vías alternativas para la alimentación. Cuando te das cuenta de que tus vías alternativas para la alimentación han acabado en una dieta a base de arroz, pasta, pizzas congeladas y ensaladas descubres que quizá esas vías no han sido tan alternativas, aunque al menos los ingredientes ahora son mucho mas sanos y poco a poco me acerco más a esa parte de mi que disfruta las legumbres, verduras y demás cosas que no podían morderte, picotearte o darte coces antes de estar en tu plato.

Y entonces pasa lo que tiene que pasar: te aburres. Comer es uno de los placeres principales de la vida o al menos eso dicen, ¿por qué no disfrutarlo? Así que lo siguiente que hace uno es automático: buscar recetas en Google. Es increíble lo aburrida que está la gente en el mundo y las ganas de publicar recetas en la red que tienen.

Benditas sean esas personas.

Aunque en realidad la única receta que saqué de la red (hasta ayer) fue una de arroz con carne al curry que no acabó de convencerme (no compré buena carne). Pero a pesar de eso he añadido un poco de variedad a mi dieta en forma de mazorcas asadas, sopitas varias (fruto de mi experiencia griposa y titánicos esfuerzos por parte de Marla) , crepes y ahora también tortilla de patatas, que surgió en mi mente a raíz de los preparativos de una fiesta donde Paula me dejó solo ante el peligro en forma de tortilla de champiñones. Tortilla de champiñones que terminó siendo revuelto de champiñones, pero eso ya lo contaré en otra ocasión. La próxima visita al LIDL implicará adquirir pescado congelado, que me han dicho que no es tan caro y sale bastante bien.

Pero en resumidas cuentas, lo importante es que he pasado de comer esto:


a comer esto:


En definitiva: Mamá... ya me he hecho un hombre.

¡Nos vemos!

PD: Ya sé subir fotos jejejeje...

2 comentarios:

Jonatan-Norway dijo...

si, en el año 2030, y me llamo Ted xD

Jonatan-Norway dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.