10-06-08: ¿Se acabó el buen tiempo?

Después de casi un mes de no ver prácticamente una nube en el cielo y ver nuestras habitaciones de Fantoft convertidas en hornos unipersonales (o multipersonales en el caso de algun@s afortunad@s), el tiempo ha vuelto a ser lo que debe ser aquí en Bergen, léase, lluvioso. Por lo que vengo oyendo desde hace al menos una semana y aplicando la regla de 3, en España debe hacer sol ahora mismo. Para los que estéis en España, sabed que no os envidio.

El caso es que no fui el único que se dio cuenta de que estar encerrado en un cuarto al que el sol golpea sin merced a lo largo de un día que parece no acabar nunca no parecía una buena idea, así que prácticamente la totalidad de los residentes de Fantoft se ha entregado al menos una vez en estos días primaverales al fenómeno mundialmente conocido como "barbacoa" mientras mosquitos del tamaño de avionetas pululaban por aquí y por allí.

Afortunadamente para este movimiento de masas, Bergen posee una cantidad envidiable de zonas verdes preparadas (o no) para albergar estos acontecimientos. Concretamente, cualquier zona de Bergen que posea césped tiene una alta probabilidad de encontrarse ocupada por estudiantes tomando el sol como si de una playa se tratase (bikinis incluidos) mientras a pocos metros una caja de barbacoa portátil (baratísimas en cualquier supermercado, por cierto) calienta unas salchichas, maíz, pollo y demás cosas de aspecto y olor más que apetecibles.

Y cuando digo cualquiera, quiero decir CUALQUIERA: desde el césped delante del bloque A-B en Fantoft hasta el césped que rodea alguna estatua en el centro de la ciudad. Todo eso sin olvidarnos por supuesto de los fiordos, lugar preferido por todo el que tenga tiempo para llegar hasta allí con unos amigos a lanzar discos, darse balonazos, bañarse y, por supuesto, hacerse la boca agua mientras se cocina algo sabroso.

Entre fiestas de despedida, ya que los exámenes han ido terminando paulatinamente, y barbacoas varias, las últimas semanas han supuesto unas merecidas vacaciones (o un simple paréntesis) para mucha gente, incluyéndome a mi, que he ido a todas las barbacoas que he podido. Por desgracia apenas hay fotos o vídeos de mi presencia en esas ocasiones, y una de ellas aparecí (yo y otros tantos) a la hora que se marchaba todo el mundo, resultando en fotos con abrazos de consolación y poses de "orgullo tardonil", las cuales no vale mucho la pena enseñar.

Para los que queráis ver verde, estáis de enhorabuena, porque tome unas cuantas fotos de naturaleza con noruegos:


... con españoles, alemanas, canadienses y suizos:


... con... hum... un equipo de música (sí, lo negro):


... y con... bueno, agua (últimamente no es fácil hacer comentarios ingeniosos):


Un sitio precioso el fiordo junto a la casa de verano de la familia real, sin duda. Como era de esperar, no iba a desperdiciar la ocasión para hacer un pequeño vídeo en el sitio mientras digo un par de tonterías tanto en español como en inglés (además con el retorno de Charlotte):



Aparte de todo esto de las barbacoas, la otra actividad predominante en estas épocas de buen tiempo (aparte de volverse a casa, costumbre bastante aburrida, todo sea dicho) es irse de excursión a alguna parte, así que después de unos días de planificación en las que mi tarjeta de crédito volvió a hacer de las suyas (y sigue haciendo, por cierto) decidí coger un par de autobuses (y tres ferrys) y visitar un clásico de Noruega el pasado fin de semana: la Preikestolen. Si no hay ganas de leerse la (corta) descripción de la wikipedia, no os preocupéis, os lo resumo en imágenes:

1) Arbolitos, hierbajos y demás naturaleza:


2) Caminos de cabras (con turista melenudo):


3) Piedras (y no de mechero):


4) Lagos (solo había uno o dos pero bueno):


5) Alturas (604 metros en el final):


y 6) Pose victoriosa después de 3 horitas de andar/escalar (aunque no se aprecie muy bien):


Cómo se nota que en la última foto no estaba pensando que si había echado 3 horas para subir posiblemente tendría que echar otras 3 horas en bajar... un poco menos, en realidad.

Suficiente aventura, supongo... para nada. Dentro de dos días y si no causo más problemas a la planificación de los que estoy causando ya, estaré rumbo a patearme tierras escandinavas, pasar el circulo polar ártico y visitar la aldea de Santa Claus en Regazolandia (en serio) entre otras cosas durante unos 10 días. Me van a tener que aguantar en Finlandia, Suecia y Estonia (Noruega se me estaba quedando pequeña), ¿no es genial?

Mensaje de esta entrada: no todo va a ser tener problemas con el dinero y los estudios estando en el extranjero, a veces hay que moverse y apreciar el mundo, que lo han puesto ahí para algo (vamos, digo yo).

Un abrazo a todos y ya os contaré algo a la vuelta (si alguien quiere que le hable bien a Papá Noel de él/ella, aún estáis a tiempo de pedirlo). ¡Nos vemos!